¿Por qué sudamos sin hacer esfuerzos?

La sudoración es un proceso fisiológico natural e indispensable para el organismo.

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Contenido

¿Por qué sudo mucho sin hacer esfuerzo?

La sudoración es un proceso fisiológico natural e indispensable para el organismo. A diario, la sudoración nos permite llevar a cabo una serie de funciones esenciales que explican por qué sudamos tanto:

  • La regulación de la temperatura corporal para mantener una temperatura media constante de 37 °C.
  • La eliminación de ciertas toxinas y ciertos residuos.
  • Una función protectora, al formar parte de los elementos esenciales para la construcción del film hidrolipídico. Este film, presente en la superficie de nuestra piel, tiene la función de protegerla contra las agresiones externas e hidratarla manteniendo el agua en la piel.

A menudo asociada a la falta de higiene, la sudoración es un mecanismo natural que no guarda ninguna relación con los problemas de higiene.

Por término medio, un ser humano secreta 1 litro de sudor al día sin hacer ningún esfuerzo especial. Sudar sin esfuerzo es, por tanto, un fenómeno completamente normal y necesario. A causa de la actividad física, el calor o las emociones fuertes, el cuerpo puede perder hasta 10 litros de sudor al día. Por eso podemos sentir que sudamos mucho con el menor esfuerzo, pues la cantidad secretada aumenta para compensar la variación de temperatura generada por el esfuerzo realizado.

Las plantas de los pies y las axilas son las zonas donde la sudoración es más abundante.
El volumen de sudor producido puede variar de una persona a otra y depende de diversos criterios, como la genética, el clima, la dieta y las eventuales terapias.
En algunos casos, la sudoración es más abundante de lo necesario, lo que se conoce como hiperhidrosis. Para la mayoría de las personas afectadas, esto resulta muy incómodo en el día a día.
Las causas de la sudoración excesiva no siempre están claras y a veces ni siquiera pueden explicarse. Afortunadamente, existen tratamientos eficaces para reducir su secreción. No hay que dudar en pedir consejo a su médico.

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