Como la piel, el cabello envejece. El envejecimiento capilar es un fenómeno natural que provoca, hacia la edad de 45-50 años, un cambio de textura del cabello mismo. Aunque esto no sucede de un día para otro, hay ciertos signos inequívocos que deben alertarle…
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No somos todos iguales ante las canas. Algunas personas tienen la suerte de verlas aparecer tardíamente, hacia los 50 años bien pasados. Pero, menos raros de lo que se piensa, son los hombres y las mujeres que ven con desolación sus primeras canas sembrar su cabellera hacia los 25-30 años. Aunque es sobre todo una cuestión de patrimonio y, por consiguiente, de herencia, hay que rendirse a la evidencia: la aparición de cabellos entrecanos y blancos es el primer signo del envejecimiento capilar, el que se ve más fácilmente.
¿La causa? Al envejecer, los melanocitos situados en la base del cabello, fabrican cada vez menos melanina. Es este pigmento, producido en mayor o menor cantidad por las células, quien aporta su color a los cabellos. Una vez que los melanocitos han agotado toda su melanina, los cabellos acaban creciendo blancos.
Es un hecho: al envejecer se observa una pérdida de volumen capilar. Tanto en el hombre como en la mujer de edad madura, el aflujo sanguíneo se efectúa peor en el cuero cabelludo y alrededor de los folículos pilosos. Estos pequeños problemas de microcirculación tienen sus consecuencias: al no estar tan bien irrigado, el bulbo del cabello recibe menos oxígeno, y los nutrimentos (vitaminas y oligoelementos), necesarios para su buen crecimiento, le llegan en menor cantidad. Resultado: la fibra capilar pierde grosor y su diámetro disminuye; es el comienzo de los cabellos finos y difíciles de peinar.
Señoras, el truco incontestable para saber si usted también sufre de lleno el envejecimiento del cabello: Forme con sus cabellos una cola de caballo y observe el resultado. ¿Nota usted que es más fina que antes? Sus cabellos están, sin duda, envejeciendo. Como cambia usted los cuidados para la cara por cuidados antiedad, oriéntese hacia los cuidados capilares específicamente estudiados para contener los síntomas del envejecimiento capilar, revitalizar y redensificar la fibra. El efecto “malus”, más allá de un cabello más fino, es que es también más vulnerable: cabellos secos, sin brillo, cabellos porosos que absorben la humedad y son indomables. Sus cabellos necesitan que se les eche una mano…
Para ayudarles a recuperar espesor y volumen utilice diariamente una gama de cuidados formulada específicamente para proteger la raíz del cabello y redensificar la fibra. ¿El otro elemento indispensable de una rutina contra el envejecimiento capilar? Una cura de complementos alimentarios ricos en antioxidantes y vitaminas, que actuará como un reforzador a largo plazo.
En la mujer, cuando llega la menopausia, la tasa de hormonas femeninas disminuyen. Las hormonas masculinas dominan, provocando el trastorno del ciclo de vida del cabello (ciclo piloso). La fase de crecimiento del cabello disminuye sin dejar verdaderamente tiempo al folículo piloso para fabricar una queratina de calidad, la proteína que constituye la mayor parte de los cabellos y les aporta su resistencia. Llegan menos elementos nutritivos y oxígeno a la raíz, la velocidad de crecimiento del cabello es más lenta, dando nacimiento a un cabello cada vez más fino. Resultado: los cabellos que crecen alrededor de los 50 años son menos robustos y resistentes, más porosos. ¡Eso es también el envejecimiento del cabello!
Estos fenómenos no solamente están vinculados a los años que pasan, sino también a las numerosas agresiones exteriores infligidas a la cabellera, tales como los rayos UV del sol, los frotes o los aparatos calentadores.
¿Sus cabellos se convierten en un rompecabezas, pero usted no sabe qué reflejos adoptar para eliminar el fenómeno? Comience por identificar si se trata de una verdadera caída de cabellos o una ralentización de su crecimiento. ¿Encuentra demasiados cabellos en la ducha? Es muy probable que se sitúe en la primera categoría. ¿Su cola de caballo o su trenza es menos espesa, sus cabellos crecen más lentamente, son más finos o más difíciles de peinar que hace unos meses? Entra usted en la 2ª categoría. Entonces, ¿para usted de qué se trata?
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