El prurito derivado de la quimioterapia

¿Qué es el prurito derivado de la quimioterapia?

El prurito derivado de la quimioterapia es el que se produce durante los tratamientos anticancerosos, ya sea la quimioterapia tradicional, las terapias dirigidas, la inmunoterapia o la radioterapia. Se presenta en todos los tipos de tratamiento contra el cáncer.

El prurito derivado de la quimioterapia es el resultado de varios mecanismos, principalmente la sequedad de la piel inducida por los distintos tratamientos.

El picor derivado de los tratamientos anticancerosos es muy común y repercute negativamente en la calidad de vida del paciente, que ya de por sí se encuentra seriamente alterada.

¿Cómo aliviar el prurito derivado de la quimioterapia?

En caso de prurito derivado de la quimioterapia, conviene seguir algunos consejos para aliviar la piel y sentir más confort:

• Lavarse con un jabón suave, un syndet o un aceite limpiador calmante sin perfume.
• Secar la piel con delicadeza efectuando toquecitos con una toalla suave de algodón.
• Aplicar una crema hidratante anti-picor en todo el cuerpo, una o varias veces al día según sea necesario. En caso de cáncer, optar por dermocosméticos de alta tolerancia.
• Llevar ropa de materiales naturales como el lino o el algodón.
• Protegerse del sol, pues la mayoría de los tratamientos contra el cáncer son fotosensibilizantes. El enrojecimiento y la irritación inducidos por la exposición al sol pueden acompañarse de prurito.

¿Cómo proteger la piel de la radioterapia?

Antes de la sesión de radioterapia, no hay que aplicarse ningún producto, ya que la piel debe permanecer limpia y seca. Después de la sesión, conviene privilegiar los cuidados que sean a la vez reparadores y calmantes. Para aliviar el prurito de forma más eficaz, lo mejor es conservar el tubo de crema en la nevera.