La sudoración excesiva de la espalda

La sudoración en la espalda suele aparecer en verano, durante una sesión intensa de deporte, después de haber sufrido un gran susto o en caso de fiebre. Cuando la sudoración es excesiva se denomina hiperhidrosis de la espalda. Se trata simplemente de una manifestación de hipersudoración.

La hipersudoración

La sudoración es un proceso natural y necesario para nuestro cuerpo. De hecho, se encarga de varias funciones, entre ellas la termorregulación del cuerpo.

La hipersudoración, también conocida como hiperhidrosis, es un fenómeno que afecta a entre el 0,6 y el 2,8%1,2 de la población. Se trata de una sudoración excesiva, es decir, la producción de más sudor del necesario para la termorregulación del cuerpo. Puede ser localizada o generalizada en todo el cuerpo.

No siempre resulta fácil identificar sus causas. En la mayoría de los casos, aparece sin ninguna razón particular en la infancia o la adolescencia. Con todo, también puede venir causada por numerosos factores:

• Un esfuerzo físico.
• Exceso de peso o malos hábitos alimenticios.
• El estrés.
• Un trastorno hormonal.
• Algunas afecciones, como la diabetes.
• O incluso la herencia.
• El uso de ciertos tratamientos farmacológicos.

¿Cuáles son las soluciones para combatir la hiperhidrosis en la espalda?

Cuando se sufre de sudoración excesiva de la espalda, se pueden adoptar una serie de medidas para luchar contra la transpiración, como favorecer la ropa de fibras naturales o de algodón, que dejan respirar la piel.

En las farmacias se pueden adquirir productos que ponen en reposo las glándulas sudoríparas durante varios días y evitan la liberación de sudor. Se llaman antitranspirantes y están disponibles en diferentes formas que se adaptan a la zona tratada.

En el caso de la hiperhidrosis dorsal, los antitranspirantes en forma de loción son más fáciles de aplicar que los de tipo roll-on o stick.


(1) Stolman LP. Treatment of hyperhidrosis. Dermatol Clin 1998; 16: 863-9 (2) Münchau A, Bhatia KP. Uses of botulinum toxin injection in medicine today. BMJ 2000; 320: 161-5