La alopecia difusa

La alopecia difusa es una patología que puede aparecer en todo el cráneo. ¿Cuáles son sus causas y síntomas?

¿Cómo reconocer la alopecia difusa?

Este tipo de caída del cabello se produce de forma homogénea en toda la cabeza. Se puede reconocer por una pérdida general de densidad y volumen en todo el cuero cabelludo.

Puede tratarse de una caída del cabello ocasional, cuya duración es inferior a 6 meses, total o parcialmente reversible. También puede tratarse de una caída crónica que resulta de la persistencia de una caída aguda o de una causa general de tipo metabólico o endocrino.

También hay una forma de alopecia localizada que, cuando es excesiva, puede ser difusa. Bautizada como “alopecia androgenética” por los profesionales, suele afectar exclusivamente a ciertas zonas del cuero cabelludo. Las zonas que suelen verse más afectadas por la alopecia difusa son el vértice y los lóbulos temporales en el caso de los hombres, y la frente y el vértice en el caso de las mujeres.

¿Qué tratamiento utilizar para la alopecia difusa en hombres y mujeres?

¿Hay algún tratamiento disponible y eficaz para la alopecia difusa? Una vez más, todo depende de la naturaleza de la caída. En el caso de una caída aguda o crónica con causas identificadas, el tratamiento debe centrarse en tratar los factores que pueden ser responsables de esta alopecia.

En lo que respecta al tratamiento de la alopecia androgenética, se han validado dos tipos de fármacos:

• *el Minoxidil y los medicamentos antiandrogénicos como el Finasteride (exclusivamente para los hombres). El dermatólogo especializado en el cuero cabelludo puede recetarlos en caso de alopecia androgenética y de alopecia difusa en mujeres o en hombres.
  
• * el trasplante capilar, la solución más duradera pero también la más cara. Habitual en los hombres, se utiliza cada vez más como tratamiento para la alopecia difusa en las mujeres. Prueba de ello es que el número de trasplantes de cabello en mujeres se ha multiplicado por tres desde 2004.

* Fuente: Blume-Peytavi et al., 2011; Norwood, 1975